Malleus Maleficarum (El martillo de las brujas, para golpear a las brujas y sus herejías con poderosa maza).
Tratado teológico reprobatorio.
1486 (composición), 1487 (edición).
Alemania, s.e.
Bruja
Bruja
En la Parte II, Capítulo VII, se cuenta que en la ciudad de Ratisbona un joven mantenía relaciones con una joven. Cuando quiso dejarla, comenzó a notar que le faltaba el miembro viril, de modo que en su lugar solo había una superficie aplastada.
Un día, angustiado, se marchó a la taberna y allí contó su caso a una mujer, que le preguntó si sospechaba de alguien; él afirmó que sí, y ella le aconsejó que usara la violencia si era necesario para que la muchacha en cuestión retirara el maleficio.
Así lo hizo el hombre, esperó a la bruja e intentó ahogarla, hasta que ella prometió devolverle lo que era suyo. La liberó y ella le tocó entre las piernas, a consecuencia de lo cual volvió a aparecer el miembro en su lugar.
Como explicarán los inquisidores en este capítulo, el miembro viril no desaparece realmente, sino que las potencias corporales, los sentidos, se ven alterados, de modo que no se puede ver lo que realmente sí está.