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Resumen |
Entre los múltiples juegos intertextuales del Retrato de la Lozana andaluza, obra del presbítero Francisco Delicado publicada en 1528 en Venecia, están bien representados los autores del siglo XV y sus obras, a los que se refiere mediante sencillas menciones, citas o aun a través de una reescritura. Así, tanto los textos de Fernando del Pulgar como La Cárcel de amor de Diego de San Pedro o La Celestina de Fernando de Rojas constituyen parte de los hipotextos que pueblan el mundo variopinto de la cortesana andaluza que nos retrata Delicado. Ahora bien el poeta cancioneril converso Antón de Montoro (¿1404-1477?) sobresale dentro de esta pléyade, aunque no por la frecuencia de las alusiones a esta figura, pues éstas se reducen a una única mención del poeta mediante su apodo « El Ropero », sino más bien por la peculiaridad del contexto en el que se inserta esta mención, entre alusiones a Séneca, Lucano y Marcial.
Nuestra comunicación pretende demostrar que esta presencia del cordobés cuatrocentista caracterizado por su agudeza verbal entre los mamotretos del siglo XVI no se reduce a una sencilla intrusión entre autores clásicos en son de burla. Correrá a nuestro cargo determinar en qué medida ciertas afinidades, de índole estética y temática, que comparten Montoro y Delicado podrían explicar la mención de aquél por éste en tan halagador entorno textual. Ahora bien, destacar los principales puntos de contacto entre La Lozana del autor aurisecular y la figura del Ropero de hecho nos permitirá perfilar la peculiaridad del estatuto social de Antón de Montoro y de su quehacer poético. |
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