[/D 8 r/]
SALVADOR DE LEÓN
Castañon a la ciudad de Cartage-
na y al Auctor.
SONETO.
E
L frio Boreas, y Austro proceloso
suele en los Alpes con rigor violent
reñir, por arrancar del hondo asiento
el roble antiguo, fuerte, y poderoso.
M
ás immoble al combate impetuoso
la furia quiebra del doblado viento
y tanto más estriva en su cimiento,
quanto es más alto el árbol espacioso.
A
ssí nuestra Cartago permanece
firme a pesar del tiempo y de Belona
porque en sus fuertes hijos ha estrivado:
C
uyo esfuerço eterniça la corona,
que Francisco Cascales le guarnece
de las piedras preciosas que ha labrado.