Como la tierra de ultramar que es la tierra de promissión sea entre todas la que más vale, allí también es santificada y consagrada del preciossíssimo cuerpo de Nuestro Señor y Redentor Jesucristo. Ca en aquella le plugo rescebir carne humana de la sacratíssima Virgen María Nuestra Señora.
En aquella tierra quiso hazer muchos milagros, predicar, enseñar y demostrar la ley verdadera a nosotros los christianos, y aunque él era el señor del firmamento y natura, se quiso llamar rey de aquella tierra, diziendo: "Rey soy de los judíos", por cuanto aquélla era la mejor y la más bendita y el corazón y medio de todas aquellas tierras. En aquella quiso Nuestro Señor hazer todo la redención de humana natura. Aquélla se puede dezir bienaventurada porque fue regalada y sembrada de la preciosíssima sangre de Nuestro Señor. Aquélla nos fue prometida en heredamiento, por lo cual cada fiel christiano deve disponerse a demandar su heredamiento y ganar esta tierra de poder de infieles; y en aquello querría yo que se ocupassen los príncipes christianos.
Y allí por animar a todos he querido componer el presente libro, el qual trata de todas las maravillas que en las tierras comarcanas que alderredor d´esta Santa Tierra de Hierusalem están.
Otrosí hallaréys todos los hombres monstruos que ay en las Indias, con otras muchas y diversas maravillas.