José Dueso (recopilador)
"Mil quinientos puyazos", en Leyendas guipuzcoanas de brujas
Leyenda popular
2014
José Dueso
Mil quinientas brujas
Bruja
En Asteasu, el casero del caserío Elorrieta, se jactaba de no creer en la existencia de las brujas. Una noche, cuando regresaba a su casa, le salió al encuentro un grupo de brujas. Su capitana lo llamó fanfarrón y quiso darle una lección mostrándole, para que así ya creyese en ellas, la friolera de mil quinientas brujas, y eso que faltaba alguna que no había podido acudir. El hombre creyó que su fin había llegado, pero no fue así, aunque sí fue obligado a contar a todas aquellas mujeres y, de cada una, recibió un golpe, así que salió bien escarmentado por su jactancia.
En otros relatos también hallamos a un incrédulo que recibe una lección, por fanfarronear de tal escepticismo, por ejemplo en el titulado "Ez Direla...", "Un pastor de pelo rojo" y "¿No hay sorgiñas?", los tres catalogados en esta base de datos.