Descripción
Un marinero de Ezcayn pide a María de Yzcayn que, ya que es bruja, le enseñe a ser brujo a él también, y a cambio le promete un sayuelo. La mujer lo conduce al aquelarre, pero el hombre, al ver que el diablo es tan feo y que todos lo besan debajo de la cola, pronuncia el nombre de Jesús, así que todo desaparece y él queda a solas y a oscuras en aquel apartado lugar. María vuelve a por él y lo lleva de regreso a su casa.