(1) El vídeo del montaje se encuentra disponible en el Centro de Documentación Teatral de Teatres de la Generalitat Valenciana. La referencia es V2101.

(2) La escuela del espectador, ADE, Madrid, 1997. Pág. 124

(3) Marco de Marinis ha destacado dos posiciones en lo que sería una nueva visión de la relación teatro-mundo donde la realidad aparece como falsa y el teatro como sincero y autentico. La primera de las posiciones, la que aquí nos interesa, es aquella que entiende el teatro como un espacio contiguo a la vida cotidiana y que trabaja "sobre la percepción del espectador para desalienarla, sobre todo mediante descontextualizaciones de los objetos-acontecimientos cotidianos". El objetivo es propiciar una nueva sensibilidad y una nueva consciencia. La otra postura es la que ve el teatro como algo totalmente separado de lo cotidiano, como espacio y tiempo sagrado. Entendre el teatre. Perfils d'una nova teatrologia. Institut del Teatre, Barcelona, 1998. Pág. 333.

(4) Matteini comenta sobre los nuevos autores:

"Opinar sobre cuál debería ser el camino generacional sería una pretensión absurda, o más sinceramente, una solemne tontería. Porque si algo define la joven, o mejor nueva escritura dramática de los últimos años -aquí y fuera de aquí- es su rica y compleja oferta de posibilidades diferentes, personales y por tanto valientes y alejadas de cualquier moda o tendencia". Textos premiados en el Marqués de Bradomín 1997. Instituto de la Juventud, Madrid, 1998. Pág. 9.


(5) Teoría del teatro, compiladora Mª del Carmen Bobes Naves, Arco/Libros, Madrid, 1997. "Contribución al análisis del espacio escénico en el teatro contemporáneo" de Michel Corvin. Pág. 202.)

(6) Ver nota 3. Pág. 345.

(7) Entrevista realizada por Yolanda Pallín a Sanchis Sinisterra. Primer acto nº 273. II/1998. Pág.34.

(8) En una breve aproximación sobre el "canon" de la poesía "postmoderna" española, Alfredo Saldaña comenta sobre ella que se conforma por

"voces que intentan buscar la singularidad en la asimilización de la diversidad (se trata del viejo mito que nos hace ser uno entre todos, únicos en el mar convulso de la colectividad), que ilustran a la perfección esa ausencia de canon y ese sincretismo de tendencias que la postmodernidad ha heredado de la modernidad más crítica."El poder de la mirada. Acerca de la poesía española postmoderna, Ediciones Episteme, colección Eutopías, Valencia, 1997. Pág. 24.


(9) Ver nota 2. pág. 118.

(10) El espacio literario, Paidós, Barcelona 1992. Pág. 157.

(11) Ver nota 3. Pág 332.

(12) Ver nota 2. Pág. 121.

(13) Després del teatre modern, Institut del teatre, Barcelona, 1991. Pág. 76.

(14)  El novelista italiano, Daniel del Giudice, ha reflexionado sobre algo que se tendría que tener en cuantea. En la actual "época de la visión total":

"Se está haciendo invisible todo lo que es desagradable. Y ello en primer lugar porque nuestra mirada se ha acostumbrado a apartarlo, ya no se ve del mismo modo que ve las cosas cotidianas. Para verlo haría falta volver a aprender a ver, y eso podría ser una actividad a la que merecería dedicarse"

Las imágenes televisivas de la muerte o de masacre, por su calidad, se convierten icónicamente en drama, pero mitigan lo desagradable. "Cómo narrar lo invisible", Revista Archipiélago, nº 10-11. Pág. 131.

(15) El cibermundo, la política de lo peor, Cátedra, Madrid, 1997. Pág. 84.

(16) P. Pavis "Síntesis prematura o cierre provisional por inventario de fin de siglo", Las puertas del drama, primavera 1999, nº2, pág 7.

(17) "La dramaturgia española actual 1985-1995" Josep Lluís Sirera, en La dramaturgia en Iberoamérica: Teoría y práctica teatral, Osvaldo Pellettieri y Eduardo Rovner editores, Galerna S.R.L., Buenos Aires, Argentina, 1998. Pág.153.

(18) Ver nota 5. Pág. 212.

(19) Respecto a estas mezclas entre lo público y lo privado podríamos dar infinidad de ejemplos: el bar cerrado de Los Motivos de Anselmo Fuentes de Yolanda Pallín; los habituales parques de Cunillé o Zarzoso; el metro de Paco Sanguino; el particular parking subterráneo de Arturo Sánchez Velasco en Martes 3 a.m. Más al sur de Carolina del Sur. También se dan casos de espacios de transición entre lo público y lo privado es el caso de personajes que encontramos en un medio de transporte: los taxis de Cunillé, el avión de Creo en Dios de Sanguino y González, el coche de Scout de Roberto García... Textos en los que también un lugar privado se vuelve público, es el caso de las fiestas de La festa de Cunillé o Valencia de Zarzoso. Por último, vemos textos donde desde una espacialidad interior se busca desesperadamente el exterior: Mirador de Zarzoso, Ventana de Arturo Sánchez Velasco, Matando Horas de Rodrigo García. En Acera derecha, también de Rodrigo, se puede descubrir un interesante juego entre lo público y lo privado, no sólo espacialmente, sino también interiorizado en el cuerpo mismo del individuo.

(20) Cita de Sinisterra sobre el espacio en Kafka:

"Un marco espacial inaprehensible por su vaguedad e imprecisión, su carácter laberíntico -o, al menos, no euclidiano- y la atmósfera enrarecida, turbia, que empaña a menudo la percepción". José Sanchis Sinisterra. L'espai fronterer Santiago Fondevila, Institut del teatre. Diputació de Catalunya, 1998.


(21) Ver nota 2. Pág. 118.

(22) Ver nota 5. Pág. 206.

(23) Ver nota 2. Pág. 122.

(24) Presencias reales. Destino Libro, Barcelona, 1998. Pág. 240.

(25) El lloc del teatre. Ciutat, arquitectura i espai escènic, ed. Antoni Ramón Graells. Edicions UPC, Barcelona, 1997. "Por una teatralidad menor" Pág. 143-144.